
Cristina volvió al ring político, pero no generó temor en el mercado. Inversores la ven acotada y enfocada en conservar poder en su bastión.

Cristina volvió al ring político, pero no generó temor en el mercado. Inversores la ven acotada y enfocada en conservar poder en su bastión.

Luego de varias ruedas negativas avanzó levemente el índice Merval.

Las obligaciones negociables (ON) concentraron el 37% del financiamiento mensual, con un total de $952.360 millones emitidos en abril.

Según EY Global (2023), 71% de los jóvenes entre 18 y 26 años espera que los servicios financieros tradicionales evolucionen hacia modelos más ágiles, personalizados y tecnológicos.

Antes de la emisión del BONTE 2030, cualquier persona que trabaja en finanzas les hubiera dicho que era imposible que se abriera el mercado internacional de crédito para el soberano antes de las elecciones de medio término.

Tanto en el exterior como a nivel interno, la primera rueda de junio tuvo cimbronazos de todo tipo. El día se inició con temblores por el fin del carry trade con el yen. Después llegó Trump con amenaza de más aranceles al acero y el aluminio. Pasando por la respuesta de Ucrania a Rusia. Resultado: el dólar cayó afuera, y hubo fuertes subas para el petróleo y los metales. A nivel local la guerra gremial se profundiza. Los dólares bajaron, las reservas subieron en falsete. Los bonos no despegan. Y la bolsa argentina sigue siendo la peor de todas.

También retrocedió contra una canasta de monedas a niveles que no se registraban desde 2023.

El tan esperado servicio de robotaxi de Tesla finalmente está listo para lanzarse en Austin a finales de este mes.

Con una colocación que sorprendió a los analistas, el Gobierno logró seducir a inversores globales. ¿Se acerca el regreso definitivo al crédito internacional?

Los inversores locales siguen tratando de digerir el 31% anual de tasa fija en pesos que pagó Caputo el viernes para conseguir US$ 1.000 M a cinco años. El costo no es bien tomado por nadie, y las cifras financieras de hoy volvieron a ser negativas. Subieron todos los dólares, cayeron las reservas. Los bonos se debilitaron. El riesgo país subió. Y la Bolsa porteña fue la peor de todas, con dura baja en bloque para los ADR argentinos.